A partir de hoy iniciaremos un seguimiento de todas las novedades que acontecen alrededor de la alta definición aplicada al DVD en cualquiera de sus concepciones. Desde dentro mismo de una empresa de creación de DVD española iremos informando de todo el proceso de adaptación desde el formato SD en el día a día.
La situación a día de hoy es la siguiente: Se han pedido ya las nuevas versiones de Scenarist 4.0 para autoría. Se han adquirido cuatro películas HD-DVD vía Amazon y un televisor de 30″ HD Ready LCD. El televisor tiene una resolución de 1366 x 768 píxeles, con lo cual es capaz de mostrar 720p pero tendrá que reescalar para mostrar 1080. El lector HD-DVD ha llegado hoy y se ha montado rápidamente una sala para empezar a visionar los HD-DVD.
El aspecto del lector adquirido, el Toshiba HD-XA1, bien recuerda al de los primitivos magnetoscopios Betamax. Es bastante más grande que los lectores de DVD convencionales, de color negro y plateado.
El primer problema que se nos ha planteado ha sido lógico por otra parte. La unidad se ha comprado directamente en Japón al no encontrarse aún a la venta en Europa y tanto el manual como las etiquetas de los botones del lector y el mando a distancia están en idioma japonés. De esta manera el visionado se ha visto retardado considerablemente al tener que emplear el método de ensayo-error y guiándonos por las indicaciones que ofrecía el televisor en cuanto a cambios de resolución, tipo de entrada de señal usada, etc.
Una vez introducido el disco en la unidad, su carga es mucho más lenta de lo que estamos acostumbrados (lo cual acentuó aún más la impresión de estar cometiendo algún error) y es bastante engorroso que haya que parar la reproducción de la película para cambiar el reescalado entre 1080 y 720 o para pasar de la salida componentes a HDMI.
Lo primero que nos hemos dado cuenta al ver las imágenes es la importancia de partir de un buen master HD. Los hinchados de SD a HD se notan y mucho, por no hablar de ver un DVD estándar, que es para echarse a llorar. Un buen master digital es primordial. La imagen de las cartelas de entrada con el logotipo de la productora que ha producido la película es lo que mejor se ve sin duda (debido a su origen 100% digital). Si quereis hacer la prueba, bajad un trailer HD de la web de Apple y tendreis un ejemplo perfecto de lo que estoy hablando. Así pues no estará de más informarnos de qué tipo de máster proviene la película si queremos disfrutar de una buena calidad. Seguramente una película como «La isla» rodada íntegramente en digital será una delicia.
La animación de los menús me ha parecido poco fluída. Ignoro si se trata del 25p o de la tasa de refresco del televisor, pero me faltaban fps por todos los lados. Los botones de selección tienen por fin degradados y a falta de hacer un análisis más a fondo poco más se puede comentar de los menús.
La imagen de la película es francamente buena, pero de nuevo aparecen artefactos en los degradados y los fundidos, siendo estos bastante apreciables cuando se trata de negros. El problema otra vez, puede ser achacado a verlo en una pantalla LCD HD-Ready en vez de verlo en una CRT Full-HD. ¿Por qué entonces no decantarse por este tipo de pantalla? Sencillamente porque la mayoría de usuarios domésticos no se la van a comprar. El Sony Bravia de 32″ donde se visionó ya nos pareció «demasiado» incluso (su precio ronda los 1.600€). En la carátula del DVD se informa de la resolución pero no así del códec empleado, lo cual hará difícil sacar alguna conclusión válida (sobretodo teniendo en cuenta la pantalla que hemos usado) hasta que no se hagan las pruebas en la misma empresa con su propio compresor.
Existe otro tipo de menús diferente al de portada. Se trata de unas plantillas personalizadas para cada película a las que se puede acceder en cualquier momento de la reproducción a modo de menú flotante desplegable desde la parte inferior. Sin dejar de reproducirse la película podremos acceder a cualquiera de las características del DVD, incluídos los extras.
Hasta aquí hemos llegado por hoy. Como próximas actividades esta tarde vendrá el productor cinematográfico Enrique Cerezo para echar un vistazo al nuevo formato y hay planeada también una exposición en un centro comercial sin fecha definida, para lo cual se está haciendo un montaje en un AVID Adrenaline. Seguiremos informando.
El HD-DVD o el Blu-Ray como mejor se ven es cuanto más tamaño de pantalla le metamos. Muy humildemente opino que en telivisor LCD de 30″ nos estamos perdiendo mucho del gran espectáculo de la HD. Para hacer pruebas fidedignas (sin ir a dispositivos 1080 nativos que de momento son muyyy caros) bastaría con probarlo con plasmas de alta gama de 42″ ó 50″ Pioneer o Panasonic y sobre todo con algún buen proyector 720p como por ejemplo el DLP Mitsubishi HC-3000 que ronda los 2000€.
Sin pruebas en dispositivos de este tipo las conclusiones no pueden ser demasiado clarificadoras puesto que los nuevos formatos se supone que explotan el equipamiento de gran calidad, que por suerte hoy en día no tiene porque costar una fortuna.
Un saludo.
Hola Sergio. Bienvenido.
No puedo más que darte la razón en todo. El dispositivo de salida limita, como bien dices, la plena capacidad del HD. Sin embargo piensa que no era ese el objetivo de la monitorización, sino más bien ponerse en el lugar de lo que podría tener un usuario medio de este tipo de lectores cuando se implante en España.
No digo que no haya por entonces gente con monitores full HD pero desde luego serán muchos más los que vean los DVD-HD con dispositivos HD-Ready como el que usamos. Piensa en el enorme boom de sispositivos LCD y plasma que se han estado vendiendo en los últimos años (y muchos de ellos ni siquiera llegan al HD-Ready). De todos modos bien es cierto que un proyector DLP como el que comentas o como el Sanyo PLV-Z3 que incluso es más barato poseen una calidad y tamaño mayor por no hablar de la experiencia de visionado.