La justicia española desestima la denuncia de Apple contra la empresa valenciana NT-K respecto a la fabricación de un tablet.
Esta semana parece que solo sabemos hablar de Apple y de Rockstar pero es que la cosa tiene miga, sobretodo porque en esta ocasión el suceso no se localiza allende los mares si no en nuestra tierra cañí.
Según la nota que ha publicado la empresa NT-K todo comenzó con un burofax de Apple en noviembre de 2010 instando a destruir un cargamento de tablets importados por plagio del iPad. Todo ello sin intervención de la justicia, claro está… aunque no se ahorraron el mencionarla en caso de no obedecer sus pretensiones.
Cualquier otro se hubiera arrugado ante las demandas de Goliat. De hecho no era la primera vez que sucedía esto mismo, sin embargo parece que Apple se encontró en esta ocasión con un grano en donde la espalda pierde su nombre y que ha sufrido en silencio hasta ahora. NT-K decidió que fuera la justicia la que decidiera y esta se ha pronunciado a su favor.
Lo más cachondo del caso es que las tablets ni siquiera eran para la venta al público, sino que eran muestras para posibles clientes y cerrar futuros tratos de negocio. Al intervenir Apple con su demanda NK-T no ha podido cumplir con sus compromisos contractuales y ahora es la empresa valenciana la que ha emprendido demanda contra los de Cupertino por daños morales, emergentes y lucro cesante.
La historia empieza a parecerse sospechosamente a otra que ya hemos visto por aquí y que no acabó nada bien para quien emprendía acciones legales indiscriminadas. Más vale que Apple vaya tomando nota.
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